Mi amor mágico, no puedo eludir decir te extraño de una manera difícil de dimensionar.
La soledad impuesta por el destino o vaya a saber por quien, es de gran ayuda para bucear en los recovecos de la mente.
En otras ocasiones manifesté , si tuviera la potestad de reformar el calendario gregoriano que rige a los católicos y aquellos que convivimos en esta sociedad, sin haberlo pedido con anticipación, arrancaría con la fuerza nacida en la furia e impotencia los meses de agosto y diciembre.
¿Por qué?
Quienes me leen saben que en una diáfana como gélida mañana de agosto, sin entender muy bien por qué te arrancaron de mi lado.
Si fue para que no padecieras más,, ahora entiendo la serenidad de tu rostro en los primeros minutos de acaecido el final.
De haber sido un castigo para mí, aún no alcanzo a comprender por qué sucedió.
Si utilizamos el raciocinio era yo quien debía partir antes que el hijo que parí para que viviera.
Nunca nadie, podrá explicarme la razón, de este sortilegio en el que me vi envuelta con el mayor de los sufrimientos.
En cuanto al mes de diciembre, tiene fechas terribles.
Sobre todo esta donde las familias se reúnen para conmemorar el nacimiento de ese ser superior en el que creen.
Nosotros también tuvimos noches buenas donde los más pequeños esperaban alrededor del clásico árbol, los regalos de Santa Claus.
Otro personaje que hace felices a los niños y prefiero guardar bajo siete llaves mi opinión.
Desde tu ausencia nada debo celebrar.
¿Es una posición egoísta?
Tal vez.
Nada tengo para festejar.
Me gusta estar sola.
Sola quiere decir eso.
Acompañada por los recuerdos.
Recuerdos que vienen sin tener que solicitar audiencia previa pues son parte de cada una de mis neuronas.
Allí estás vos.
¿Qué hago en soledad absoluta?
Nada en especial.
Generalmente escucho música.
No radio pues antes de la media noche los animadores de radio o televisión parecieran estar tomados de un cable conductor de electricidad.
Poseo otras opciones y no utilizo las tradicionales.
¿Ignoran que Jesús de Nazareth, no nació en la abundancia?
¿Cuál es el sentimiento de los católicos a la hora de cenar como si fuera la última vez que lo harán en su vida?
Nada tiene que ver una cosa con la otra.
No los juzgo.
Jamás me erijo en juez.
Soy respetuosa de todas las elecciones.
De las tradiciones que se transmiten de generación en generación.
Soy libre de decir, no las comparto.
No es resentimiento por haber perdido un hijo.
El dolor inconmensurable, no es objeto de calificación.
En absoluta soledad y paz, decidí pensar en algo que nos gustara a los dos.
No te equivocaste.
Tu medio de vida además de la terrenal.
El agua.
Vos para deslizarte haciendo piruetas como un delfín.
En mi caso para soñar con la transparencia de cada gota de agua.
No siempre las pienso como si fuera una lluvia fenomenal.
Mis musas las pueden convertir en transparencias para recordar.
Como si fueran uj géiser imaginario, surgen al revés.
De abajo hacia arriba formando figuras que solo se pueden mirar u observar con los ojos del alma.
Si tuviera que compararlas con algo en particular, diría que son las sobrantes de un lago que deciden ascender a tu cielo o el lugar donde estás, para que no extrañes, suelo terrenal.
Nadie se atreve a decirme o contarme que puedo encontrar en tu hábitat.
¿Existen vergeles de agua cristalina donde te puedas sumergir, demostrando tus aptitudes?
¿Vertientes de agua para quien pudo llegar al último peldaño y acceder a ese, lugar tan enigmático?
¿El movimiento es solo un pensamiento de los terrenales?
¿Por qué nadie puede contarme como transcurren tus horas allí?
Desearía pensar que los seres inertes poseen movimiento para desplazarse hacia donde quieren llegar.
Nada de ello ocurre.
La realidad golpea de manera fatal.
No hace diferencias de género a la hora de asestar los peores golpes.
Se ufana de su maldad.
Ríe como una arpía cuando consuma el caudal de su malicia.
Por ello preciso las transparencias, de las gotas de agua, no solo para lavar mis heridas, sino para que lleguen a vos en forma de ese beso que hace casi cincuenta y dos meses no te puedo dar.
Jamás dejaré de preguntarles a esos entes, si no exageraron con el castigo.
Hurgo en la memoria.
¿Errores?
He cometido como cualquier ser normal que viva en la tierra.
No deslindo responsabilidades.
Arrebatarme al ser que más amo en el mundo me parece una exageración.
Reclamaré hasta que decidan llevarme a su lado.
Pensar en la soledad que puede tomarlo cautivo, además de impotencia produce daños que no se subsanan llorándolo.
Deseo estar con mi descendiente.
Nada más debo hacer aquí.
He dejado todo listo para que quienes deban hacerse cargo de mi final no tengan mayores inconvenientes.
¿Qué hago aquí?
¿No es impertinente tanto abuso de mi paciencia?
Querido mío, quiero estar con vos para siempre.
Estoy hastiada de permanecer, donde no me encuentro cómoda.
Si he tenido culpas, creo haberlas saldado con lo más sagrado de mi vida.
Mi hijo.
Pierden su esencia al mantenerme cautiva.
Les he comunicado más de una vez que no utilizaré ningún atajo.
Respeto antes que mi vida la memoria de mi hijo.
¡Basta!
Es un delito me mantengan donde no quiero estar.
Tesoro estos personajes no entienden de nuestra necesidad de estar juntos eternamente.
Llegaré.
Pie favor nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=Us2IDw5Qcf8
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