LA FORMA DE LAS LÁGRIMAS

Buenos días mi precioso.
Mañana extraña.
El cielo no se define entre las nubes oscuras preludio de más frío o tibios rayos de sol.
Época de cyclamen las plantas que más te gustaban por parecerse demasiado a las orquídeas sin tener la particularidad de éstas crecer casi flotando o en plena selva, tanto argentina, brasilera como colombiana crecen adheridas a la rama de un árbol como si fueran una flor silvestre.
Nunca pudimos tener una especia tan bella que floreciera.
Uno de tus hermanos del alma tiene dos variedades una de color violeta con pintas más oscuras y la otra de color amarillo.
Como pocos elegidos, cuando las veo fotografiadas insisto en que posee los dedos verdes.
Todas las plantas que tiene en su departamento, florecen.
¿Recordás cuantas veces compré helechos de la variedad “Nidus Avis” y todas terminaron feneciendo pese a los cuidados prodigados?
Tu hermanote la vida posee en el balcón de su departamento variadas especies de plantas, con flores o sin ellas.
Impecables.
Envidiables.
No tengo prurito en decirlo puesto hago más que manifestar la verdad.
En la época de floración de las orquídeas les toma fotos, que sube a su página.
Pude advertir sobre eso que creía tierra unas tablitas de madera como si fueran barras de chocolate.
Obviamente le pregunté ¿Cuál era la función a cumplir?
Son tablitas de madera que supongo se adquieren en los viveros para sostener el humus que necesitan esas flores.
Está orgulloso de sus plantas.
No es para menos.
Son bellísimas, tanto las que tienen flor como las que carecen de ellas.
Por u momento imaginé que las gotas de agua que mantienen vitales las plantas se parecen demasiado a la forma de las lágrimas derramadas con dolor.
No voy a negar experimenté las nacidas en la alegría.
También existen.
Son las que surgen de la emoción cuando se concretan los sueños.
Ello ocurrió cuando naciste a media mañana de un día de octubre.
Plena primavera estallando en una vida nueva.
Un niño curioso desde el primer vagido, con los ojos enormes mirando a su alrededor.
Siempre pudiste manifestarte con el don de la mirada que vale más que todas las palabras del universo.
Tu opción para después de tu muerte hizo que esos ojos que amé tanto se convirtieran en cenizas volando en libertad.
Recibí algunas críticas por haber cumplido con tu mandato.
No de manera directa sino indirecta.
Allí entendí que es muy difícil ponerse en el lugar de una mamá que ha perdido a su hijo.
Muchos querían te velara como se hace con casi todos los fallecidos.
Nuestras palabras fueron y serán un tratado para cumplir.
La muerte no se exhibe.
Es un designio que iguala a todos.
¿Es necesario mostrar a desconocidos el dolor que nace en lo más profundo de l ser de una mujer?
Si tuviese la potestad no permitiría entre los cristianos el uso de cementerios tal cual se hace en los países del primer mundo.
Solo respetaría las voluntades ancestrales de ciertas religiones que no permiten la incineración.
D esa manera terminaría con el comercio más vil que puede existir.
El después.
Se honra a quien ha partido mientras está vivo.
De nada vale el mejor monumento transformado en sepulcro de mármol.
¿No se han dado cuenta los hipócritas que el muerto no lo ve?
¿Cuándo van a comprender que la muerte iguala?
¿Los ataúdes carecen de bolsillos?
No soy quien para modificar las conductas de terceros que no conozco ni movería un dedo para encontrarlos.
Nadie tiene que coincidir con mi pensamiento, es solo mío y por el momento, no necesita expansión?
Quiero creer estás en alguna parte invisible a la vista de los terrenales.
¿Por qué no puedo saber cuál es?
¿Nadie comprende el hartazgo que produce la espera?
En ocasiones tengo ganas de dejarme estar.
Allí recibo la energía del ser de luz que más amo en el mundo y sigo sin entender muy buen para qué y por qué.
Concluí con todos los trámites, que podía tener pendientes para aliviarme, el trabajo a quienes creo me siguen en el camino.
Tengo una vida transparente.
Nunca quise comprometer a nadie.
En alguna oportunidad me lo sugirieron,
Callé.
Nadie tiene obligaciones para conmigo.
El mejor juez es la conciencia.
Sigo pensando que antes de hablar hay que pensar muy bien cada palabra que se pronuncia.
Mi riqueza es la memoria.
Querido, hoy pensaba las distintas formas que adquieren las lágrimas.
No son simples gotas que caen sin destino.
A veces adquieren formas.
Depende de la imaginación de quien las vierte.
Días pasados en nuestro intercambio tornasolado, decía que las gotas se parecían a una mujer transportando el cuerpo yaciente de un ser querido.
Las que están en la imagen de hoy, las asocio con las de un deportista a punto de concretar su jugada maestra.
No pertenezco a ese gripo de elegidos que provocan el pacer de quienes los miras.
Mis lágrimas.
Ada una de las que nacen movidas por el sentimiento más puro que es el amor de una madre a su hijo su tuvieran que adquirir un formato sería el de letras que permitieran unir las siete que componen tu nombre.
No puede ser.
Son demasiadas las cosas que se me niegan sin conocer el argumento.
Sierre, miro tus fotos antes de iniciar estos enlaces.
En algunas estás transmitiendo alegría.
En otras, las cercanas al final, mirabas como si quisiera haber adivinado ¿Qué había más allá de tus lindos ojos?
Seguramente hijito querido no pensabas la muerte estaba tan próxima para dejarnos solos.
A vos vaya a saber en qué lugar del universo.
A mi en este suelo que detesto donde más de una vez con el silencio me hacen sentir que sobro.
De todas maneras no me importa la indiferencia que me regalan.
Alguna chanza que aparece por allí.
Quiero pensar es sin maldad y su fuera con ella ¿Existe algo más que pueda perder?
No te tengo
El que no ha pasado por esa experiencia puede, tildarte de maniático depresivo.
Nada de ello.
Los quisiera ver un instante dentro de mis sentimientos.
Sin piedad con la indiferencia sin sentido te hacen pensar que el cariño de un ser solitario no les importa.
No padezco de necedad.
Agradezco infinitamente las manos que me tendieron en su momento.
Deberían, haber callado la mezquindad a la que respondí con actos.
Eso lo aprendí de mi gran maestro.
Pese a tu juventud siempre demostraste ser sabio.
De todos y cada uno realizaste el mejor análisis.
No te preocupes.
De ninguna manera me siento mal por esas pequeñeces.
Solo pienso en vos.
Darle forma a mis lágrimas para transformar el llano en canción que pueda alegrar tus oídos.
No me dejes sola mucho tiempo más.
Entiendo que no depende de vos.
Solo te pido que intercedas para ser liberada de este cautiverio que no soporto más.
Necesito estar como nunca a tu lado para darte un beso.
Recibir tu mirada de aprobación.
No he dejado nada librado al azar en cuanto a papeles se refiere.
Como a mí las cosas materiales no nos interesan, sin embargo hay que ser previsor.
Hijito ayudame a irme de aquí.
Es una carga pesada estar en un sitio que parece hubiera usurpado.
Mí única utopía a cristalizar es estar juntos de una vez.
Lo demás carece de interés.
Preciso abrazarte para no decaer.
Temo alas profundidades, desconocidas e inmerecidas.
¡Aquí estoy!
Vengan en mi búsqueda.
No tiene sentido seguir esperando.
Te amo tesoro.
Su pidiera encontrarte quedaría como una niña abrazada en ti regazo.
No ha podido ser por ahora.
Te amo y en nombre de ese sentimiento incondicional solo te pido nunca olvides cuanto te quiere tu mamá..

https://www.youtube.com/watch?v=dpNdMIAnKko