Buenos días mi amor divino.
Daría todo lo que tengo para visualizarte un instante.
Gracias por aparecer en mis sueños aún cuando haya sido de una manera confusa.
Me encantaría poder interpretarlos para entender por qué se presentan de esa forma.
Estaba integrado por otros fallecidos que alguna vez pude ver sus fotos en los periódicos.
Estado onírico extraño que agradezco, pues pude verte un instante.
¿Por qué será que siempre te veo lejano?
Aterran esas imágenes dado que no sé con certidumbre si corresponden a la realidad o al mundo de las entelequias.
Continuamos con el aislamiento sanitario obligatorio.
Entiendo que por la cifra de infectados, mañana las autoridades además de extender esta cuarentena que en realidad lleva sesenta y tres días, hará más estricta.
Tampoco comprendo por qué los periodistas alargan en un día el aislamiento.
Algunos utilizan la palabra confinamiento, no es exacta.
Está confinado aquel que ha perdido sus derechos por haber cometido excesos legales.
Es tan fácil contar los días que los llamaría para hacerles notar su error.
No pierdo el tiempo.
No lo hacen solo los periodistas o desinformadotes que no siguen al gobierno de turno.
El error se repite en aquellos que se han unido al oficialismo desde siempre.
He visto a muchos cambiar por intereses la camiseta.
Un error garrafal de aquellos que no se aunan, para mantener sus pensamientos aún cuando los cuatro vientos le sean favorables.
Tampoco me gusta que a las mediciones de infectados se agreguen bocadillos fuera de lugar.
Nadie esperaba esta pandemia que hace estragos en todo el mundo.
Sin embargo algunos tratan de eludir responsabilidades culpando a otros.
No creo que ningún gobernante más allá de sus ideas políticas pueda asignarle sin que se le caiga, la cara de vergüenza las víctimas a determinadas ideologías.
Gente poco idónea, deberían saber que cada número de la lista corresponde a una persona.
Un terrenal como cada uno de nosotros que sin querer pueden haber contagiado a su familia.
¡No han aprendido nada!
El ego los supera-
El virus no pregunta a cada uno de los contagiados cual es su preferencia política.
Busquen en el diccionario, el de papel, la enciclopedia o el de la red el significado de la palabra dignidad.
Luego mírense en un espejo.
¿Qué figura les devuelve?
Imaginen por un momento que esa lámina brillante con el alma de opaco azogue, es perfecta?
¿Tampoco pueden verse reflejados?
Son ustedes mostrando sus mezquindades.
Me recuerdan la necedad de Voltaire, innecesaria por cierto “Piensa como yo o muere”
¿Por qué debo pensar como él?
Lo reconozco como pensador, no como persona.
Como no puedo desplazarme físicamente a los lugares que quisiera, siempre le pido auxilio a mis musas o la imaginación.
Son el transporte más eficiente para transportarme a esos mundos que no conozco.
Los pensamientos encendidos por el amor que te tengo, pueden acercarme a enclaves exóticos.
He de reconocer que no me han llevado a pasear por el universo.
¿Es allí donde está tu morada?
¿Cómo es?
¿Transcurren las estaciones del año?
¿Quién te abriga cuando tenés frío?
¿Recordás cuando te decía en pleno invierno cuando salías de la ducha, que los humanos no se paseaban por la casa con el torso desnudo?
Recién allí con la más hermosa de las sonrisas tomabas una bata abrigada?
Para este tiempo hace cinco años, la hermosura de tu rostro se había transformado.
La mirada tenía un velo de nostalgia inolvidable e indescriptible.
Cuando no lo advertías te observaba.
¿Llegaste a saber que un libro escondía mi cisión.
No quería transmitirte mi dolor.
Lentamente la muerte comenzó a acercarse.
Cambiaste algunas costumbres.
El cariño era un ida y vuelta de conversaciones establecidas sin el don de la palabra. ¡Cuánto decía el intercambio de miradas!
¿Por qué hubimos de callar la inminencia del fin?
Sé que a tu entorno más cercano, en medio del padecimiento físico, a tu entorno le pediste no me dejaran sola.
También en medio del dolor punzante sin necesidad pues la suerte estaba echada, le pedías a esa manada de pseudos médicos que te salvaran la vida pues tenías que cuidarme.
¿Habrán entendido esos seres bestiales el ruego nacido en tu pecho dolorido?
No omitieron causarte ningún estrago.
No entiendo como hiciste para recibirlos con una sonrisa.
Confiabas en ellos.
Me pedías no los peleara.
Hasta el último momento pensaste en tu mamá.
Tuve que mentirte cuando saqué a empujones a uno de los especialistas (eso dijo ser).
El inhumano quería sonsacarme datos como si fuera una mujer con discapacidad mental, datos para confeccionar el certificado de defunción por anticipado.
Además de agredirlo físicamente, le hice saber que nunca aceptaría se redactara por anticipado tu defunción poco me importaba fuera un fin de semana.
¡Bestia!
¡Mil veces peor que una bestia!
¿Dónde realizaste tu juramento hipocrático?
¿Dónde quedaron los valores?
Eras una mole.
No te tuve miedo cuando te saqué de la habitación.
Nunca te permitiría arruinaras el final de mi hijo.
Un muchacho inteligente que iba delante de ustedes que antepusieron el carro a los caballos.
Los dos sabíamos de la muerte cercana.
Nos subestimaron, por ser vulnerables.
Vi sufrías el daño en tu cuerpo, el mío estaba en el alma.
A ese tipo de médicos, esa carrera estudiaron y no es mi estilo escribir imprecaciones, les sugiero “Nunca subestimen a una mujer que sabe su hijo morirá en horas.
Como las dieras hasta el final defenderá a su cría.
No se conviertan en bufones patéticos al dar el pésame.
Su hubieran tenido atisbos de humanidad, jamás hubiesen utilizado a mi hijo como presa para ver quien obtenía la mejor parte.
Fueron repugnantes.
Hasta después de muerto quisieron sacarle una muestra.
En el momento que amenacé al médico arrojarlo por la ventana de un sexto piso, el ratón se escondió en medio de los médicos residentes.
Eso pinta a los médicos de clínicas con plantitas y plasmas”
Mi hijo no volverá nunca.
Es más quizás tampoco lo encuentre después de muerta.
Pude haber ganado una fortuna incalculable por mala praxis.
Todas las condiciones me favorecían.
Por ello decidí cumplir con su último deseo de ser incinerado.
Jamás mi tesoro hubiera permitido lo manipularan después de muerto.
Como madre estuve de acuerdo con esa decisión.
Jamás de los jamases hubiese sepultado a mi hijo dos veces.
Durante treinta y nueve días y sus noches, conservé a mi lado sus cenizas.
Cuando llegué a mi refugio lo traje.
Una integrante de mi familia chiquita insistió para que lo llevara hacia el lugar donde se supone está la urna.
El alma debía elevarse.
Todo transcurrió tal cual lo pensó el ser que más amo en la vida.
Hoy cuando se están por cumplir cinco años de su muerte terrena, no dejo de preguntarme
¿Qué hago aquí?
Cada uno de mis pensamientos en mi hijo adorado confluye.
Es como si mi cerebro estuviera en el interior de una lámpara, los filamentos mantienen la mente encendida.
En cada uno de los lóbulos cerebrales, están labadas las siete letras que componen su nombre.
¿Puedo pedir algo más?
Sí.
Estar prontamente junto al ser que más amo en la vida.
Secar con mis dedos cada lágrima que ruede por su rostro.
A mi hijo querido no le gustaba estar solo.
Necesita a su familia choquita, a los hermanos del alma.
He hablado con el Director del cementerio.
Tiene el segundo nombre de mi hijo.
No nos conocemos personalmente.
Ahora menos.
No se pueden visitar los lugares donde se suponen están los restos de los muertos, sean cenizas o la forma que eligieron en vida.
¿Pueden comprender mi rechazo a la vida?
¿Poco me importa si desaparecen archivos de mi computadora.
Por un momento le pido a mis lectores como reaccionarían ante la muerte de un hijo.
Creo estar anestesiada.
No quiero despertar para encontrarme con una realidad solitaria.
Deseo pinceladas de paz.
Nunca he molestado a nadie.
Hagan lo propio conmigo.
Hijito
¿Cual es la manea de decirte te amo, utilizando palabras que ni se parezcan a ninguna?
¿Cómo decirte que te amo con lenguaje exclusivo?
¿Cómo contarte las transformaciones de un alma divida en hilachas?
¿Qué palabras utilizar para describir la intensidad de mi amor?
Quiero irme a esos lugares que has conocido por designios del destino?
Te amo e manera rabiosa.
Por favor tesoro, dueño de mis pensamientos, nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=YzYmF059VkU
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